Entregarse es peligroso, pero necesario para avanzar. Darse de verdad a una causa que esté imbricada con sinceridad con los deseos personales es algo que hoy se considera casi tabú en este mundo estandarizado. Por eso hay que celebrar las historias que transcurren en los volcanes y en los márgenes. Buena reseña.
Es complicado que la mayoría de las personas acepten está lógica y más que esto incluso podría tratarse de una realidad para algunos cuantos; no la aceptarían al no comprenderla porque es compleja de entender, o es demasiado anormal, tal vez no son sensibles ante este sentimiento. Suena tentadora la idea de leer a Gerardo Cruz, ya que nos abre las puertas, a lo que al parecer es, basto universo lleno de nuevas posibilidades, quizá también un mundo de comprensión. (Felicidades, de verdad me dieron ganas de leerlo, excelente reseña.)